EVITAR QUE LOS NIÑOS CAIGAN EN EL CONSUMISMO

Tras conocer las consecuencias y efectos del consumismo en las personas, y sobre todo en los más peques, qué mejor que dar unos consejos para iniciar a éstos en una actividad que puede ayudar bastante a evitar que los niños caigan en ese afán consumista. Nos referimos a la lectura.
Como sabemos, a los niños se les inculcan desde pequeños las conductas a seguir, por lo que padres y maestros debemos presentar un buen modelo a éstos. Para iniciar a los alumnos a la lectura y suscitar interés por ella, lo más aconsejable es contar con una biblioteca de aula que contenga libros adaptados al nivel y gusto de los niños. Puesto que la lectura es, en parte, una experiencia social, es conveniente que esté acompañada de conversación , preguntas, bromas, etc, ya que las experiencias más valiosas de la lectura no es la lectura en sí, sino el rato agradable en el que se desarrolla.

Un aspecto también muy importante, es que los primeros que debemos leer somos nosotros. Los niños tienden a imitar las conductas de los mayores, por lo que si nosotros leemos y transmitimos ese amor a la lectura, ellos también lo harán.
En entradas anteriores, se mencionaba el papel que desempeña el ocio frente a la escuela. Pues bien, la televisión compite con ventaja con la lectura. En este aspecto, los que más pueden hacer, son los padres, limitando el tiempo dedicado a la televisión, seleccionando los programas de TV, viendo programas con los niños, y animándoles a ver programas educativos.
Si los adultos nos acercamos a los niños para enseñarles a manejar libros, a observar y comentar imágenes y a leer con ellos, disfrutarán de las lecturas como de sus otros juegos y distracciones.
Los libros despiertan el interés y contribuyen al desarrollo de la imaginación, educando la sensibilidad, mostrando patrones de conducta y explicaciones de los misterios de la vida.

Así que, ¿a qué estáis esperando? ¡A leer!